El senador y precandidato presidencial Miguel Uribe Turbay está en condición “extremadamente crítica” por un edema cerebral tras la segunda cirugía a la que fue sometido este lunes, informó la Fundación Santa Fe de Bogotá, donde está ingresado por la heridas sufridas el 7 de junio en un atentado.
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El político, de 39 años, “salió de cirugía y su condición es extremadamente crítica caracterizada por edema cerebral persistente y sangrado intracerebral de difícil control”, indicó el centro médico en el último de los tres partes divulgado este lunes.
Uribe Turbay, que en el atentado resultó herido con dos disparos en la cabeza y uno en la pierna izquierda, fue sometido en la mañana del lunes a una cirugía neuroquirúrgica de urgencia tras detectarse un “sangrado intracerebral agudo”, según los médicos.
“Por lo anterior, la condición del paciente es de la máxima gravedad”, señala el comunicado, y añade que seguirá bajo “monitoreo continuo con un pronóstico reservado”.
En el primer parte médico del día, la Santa Fe informó que al senador se le había hecho en la madrugada “una intervención quirúrgica complementaria al procedimiento inicial” del 7 de junio, día del atentado.
Tras esa cirugía, estaba con tendencia a la estabilidad y en condición clínica “crítica, con pronóstico neurológico reservado”, pero horas después tuvieron que hacerle la nueva operación por el sangrado cerebral.
Batalla
Luego del último parte médico de la clínica, la esposa de Uribe Turbay, María Claudia Tarazona, declaró a periodistas que el político seguía “luchando por su vida, como nunca antes lo había hecho, como nunca antes se había visto”.
“Hoy, con el corazón en la mano, tengo que decirles que está librando la batalla más difícil que habíamos transitado hasta el día de hoy. Por eso salgo para pedirles a cada uno de los colombianos nuevamente, apelando a su buen corazón, al amor que sienten por Miguel, por mi familia y por Colombia, que hagamos una oración masiva”, dijo.
Tarazona insistió en que “el día de hoy (lunes) es crucial”.
Uribe Turbay, del partido de derecha Centro Democrático, fue herido hace nueve días cuando pronunciaba un discurso ante decenas de seguidores en un parque del barrio bogotano de Modelia, como parte de su actividad política de cara a las elecciones presidenciales de 2026.
Por este atentado han sido detenidas tres personas, entre ellas el pistolero, un menor de 15 años que tenía en su poder una pistola de marca Glock usada en el ataque.
Los otros dos detenidos, que al parecer participaron en la preparación del atentado, son Carlos Eduardo Mora González, detenido tres días después en Bogotá, y la soledeña llamada Katerine Andrea Martínez, arrestada el fin de semana en Florencia, capital del departamento de Caquetá, en el sur del país.
El atentado ha provocado una ola de solidaridad con Uribe Turbay que el domingo llevó a miles de personas a las calles de Bogotá y más de 20 ciudades colombianas en una manifestación llamada Marcha del Silencio contra la violencia.
Nuevas denuncias
El abogado Miguel Uribe Turbay denunció haber recibido amenazas de muerte y pidió a la Fiscalía medidas urgentes de protección para los funcionarios que investigan el caso, informaron este lunes medios locales.
Las amenazas contra el penalista Víctor Mosquera Marín, quien asumió la representación legal de Uribe Turbay, llegaron a través de redes sociales y ya fueron puestas en conocimiento de la Fiscalía, según Caracol Radio y W Radio.
Mosquera pidió a la Unidad Nacional de Protección (UNP) reforzar su esquema de seguridad, y envió una carta a la fiscal general, Luz Adriana Camargo, solicitando medidas urgentes de protección para los fiscales que investigan el atentado contra el senador, ocurrido el pasado 7 de junio durante un acto de campaña en Bogotá.
“En atención a la gravedad y sensibilidad del caso relacionado con el senador y precandidato presidencial Miguel Uribe Turbay, respetuosamente me permito remitir a continuación solicitud de adopción urgente de medidas de protección para los fiscales que actualmente están encargados de dicho proceso”, se lee en la misiva difundida por los medios.
Detalles de la investigación
Katerine Andrea Martínez Martínez es la mujer identificada por las autoridades como una pieza fundamental en la investigación del atentado contra el precandidato presidencial Miguel Uribe Turbay, ocurrido el pasado 7 de junio en el occidente de Bogotá. La joven, quien cumplió 19 años recientemente, se convirtió en el nuevo foco del estudio que busca esclarecer la autoría intelectual del ataque.
Nacida en Soledad, Atlántico, según consta en los registros de la notaría segunda del municipio, Martínez llegó a la capital colombiana hace pocos meses. Su llegada a Bogotá no pasó desapercibida para las autoridades judiciales, quienes la vinculan con un individuo perteneciente a una banda criminal especializada en hurtos.
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Una investigación realizada por el diario El Tiempo reveló que la mujer inicialmente se estableció en la localidad de Tunjuelito, pero posteriormente se trasladó al barrio Plaza de las Américas, específicamente a la dirección Primero de Mayo con 69C. Esta ubicación coincide con el lugar donde Carlos Eduardo Mora González, conductor del Chevrolet Spark ya judicializado, recogía frecuentemente a otro de los presuntos autores del atentado.
El día del ataque, Katerine Andrea actuó bajo el alias de Gabriela para coordinar aspectos cruciales de la operación criminal. Fue ella quien solicitó el servicio de motocicleta que transportaría al sicario desde la calle 69B con carrera 94 hasta el barrio Modelia, donde Uribe Turbay se encontraba realizando un mitín político.
Las investigaciones establecieron que la joven también participó directamente en la entrega del arma homicida. Se bajó del Chevrolet Spark gris en el momento preciso para que el sicario recibiera la pistola Glock con la que ejecutaría el intento de magnicidio.
Martínez compartía un apartamento en Plaza de las Américas y recibía visitas frecuentes de otros individuos, según reveló un informe al que tuvo acceso El Tiempo. El inmueble sirvió como base de operaciones para alias el Costeño, identificado como el presunto coordinador del atentado y quien fue trasladado por Mora González hasta Modelia el 5 de junio para realizar el reconocimiento previo de la zona.
La participación de la joven en la coordinación logística se confirmó también a través de las comunicaciones. El conductor de la motocicleta que transportó al sicario declaró que este último le solicitó un minuto de celular para contactar a quien pagaría el servicio, llamada que aparentemente realizó a “Gabriela”.
Tras el atentado, las pesquisas se trasladaron hacia Florencia, Caquetá, donde Katerine Andrea Martínez se refugió. Esta conexión geográfica no es casualidad: el conductor del Spark, Carlos Eduardo Mora González, tiene un proceso judicial abierto en esa misma región por porte ilegal de armas, lo que sugiere vínculos criminales previos en el territorio caqueteño.
Gobierno de Ecuador desconoce información sobre autor del ataque
La portavoz del Gobierno de Ecuador, Carolina Jaramillo, aseguró este lunes que las “fuentes de inteligencia” del Estado “no tienen información” sobre si el encargado de planificar el atentado contra el precandidato presidencial Miguel Uribe se ubica actualmente dentro del territorio ecuatoriano.
“No es información oficial y no tenemos nada que decir al respecto”, declaró Jaramillo en una rueda de prensa desde el Palacio de Carondelet, la sede presidencial de Ecuador.
De esta forma, la vocera descartó que se haya iniciado una investigación dentro del Estado ecuatoriano sobre el tema y dijo que, por el momento, Colombia no ha solicitado ayuda.
Sus declaraciones se producen después de que la Fiscalía imputara a Carlos Eduardo Mora González, un segundo implicado en el intento de asesinato del senador. Este segundo sospechoso, señalado por haber formado parte de la logística del atentado, confesó presuntamente que el encagrado de planificar el atentado se apoda ‘El Churco’.
